El día en el que las cataratas del Niágara se secaron

niagara

El pasado 30 de marzo se cumplieron 165 años del insólito día en el que las cataratas del Niágara se quedaron sin agua. Este suceso empezó cerca de la medianoche del 29 de marzo de 1848. El viento provocó que grandes bloques de hielo del lago Erie taponasen el cauce del rio Niagara, provocando que el agua dejase de fluir casi por completo durante 30 o 40 horas, y que las cataratas se secasen. En la siguiente foto, la flecha inferior indica el lugar donde se produjo el taponamiento, cerca de Buffalo, y la flecha superior indica el emplazamiento de las cataratas.

mapa

En la mañana del 30 de marzo, los residentes de la zona se quedaron sorprendidos al descubrir que el normalmente ensordecedor ruido de las cataratas había desaparecido, al igual que el caudal del rio, que se había tornado en un mero goteo. Los molinos instalados en el cauce del Niagara tuvieron que cerrar ya que no había agua para moverlos. La curiosidad atrajo a la gente al barranco donde el día anterior se encontraban las cataratas, y en el que se descubrieron objetos que habían estado allí ocultos por años: pistolas, bayonetas, hachas, mosquetes y otros artefactos de la guerra de 1812.

Muchos tuvieron miedo y no faltaron los que vieron el suceso como un presagio apocalíptico. En la mañana del día 31, la gente se fue a rezar a las iglesias temiendo lo peor. El temor y la ansiedad iban en aumento hasta la noche del 31 de marzo, cuando un estrépito se escuchó rio arriba. Era el hielo que había cedido a la presión del agua y al cambio de orientación del viento, haciendo que el cauce del rio volviera a la normalidad.  Un muro de agua avanzó a una velocidad sorprendente, cubriendo de nuevo lo que había quedado expuesto por un breve momento. El regreso del rugido de las cataratas, tranquilizó a los residente que ahora podían respirar aliviados y volver a sus actividades normales.

Después de esta fecha, las cataratas se han secado en otras dos ocasiones, pero esta vez de forma artificial.

En 1953, el flujo de agua se interrumpió para la construcción de un encofrado que permitiese un flujo más uniforme agua y así reducir la tasa de erosión.

En 1969, el Cuerpo de Ingenieros de los EE.UU. construyeron unas presas que detuvieron, o más bien redujeron, el flujo de agua de las cataratas. Esto se hizo para permitir el estudio de las formaciones rocosas de la cima, y para analizar la viabilidad de retirar las rocas de su base. Al final, los ingenieros decidieron dejar todo como estaba.
1969

1969 2

Fuente: niagarafrontier.com

  • Tuvieron suerte de que no haya habido víctimas!! me imagino los curiosos aprovechando a darse una vuelta por el cauce seco.

    Por otra parte, como siempre los crédulos pensando que era un signo del fin del mundo y el apocalipsis…

  • ¡Alguien avisó al que se tiraba dentro de un barril?

  • Se podría decir que en el segundo caso, de secado artificial, que eso si que es cambiar el curso natural, XD…pero vemos que sin ayuda humana también sucede…lo que es menos probable en la naturaleza es que las cataratas en la córnea se detengan porque sí. Cuando leí «El médico», de Noa Gordon, apuntaba que ya los árabes en siglo XI las curaban raspando la córnea con una hoja metálica. :grima:

  • Impresionante ver las Cataratas del Niagara así!

  • Me gustaron mas las fotos cuando estuvieron congeladas la temporada anterior



\Incluya

Puedes seguir las respuestas a esta entrada por RSS 2.0 feed.