El mal gusto del agua de mar

agua

Creo que todos conocéis a Ángel Gracia, un personaje del folclore magufo, asiduo de los shows del club de la comedia financiados por el cazadebunkers, que dice ser doctor y miembro certificado de la American Association of Nutritional Consultants. Se omite el pequeño detalle de que cualquiera puede ser miembro de este organismo (certificado, por supuesto) por una cuota anual de 70$.

Este personaje que aparece continuamente haciendo publicidad de sus libros y de su dieta del delfín, braceando igual que Michael Phelps antes de nadar un 200 mariposa, pretende hacernos creer que el agua de mar es el secreto de la eterna juventud y de la salud.

Hace unas semanas apareció en un programa de la televisión española protagonizando el espectáculo bochornoso que podéis ver a continuación. En su mismo lado de la mesa participaba un portavoz de la empresa Laboratorios Quintón, que comercializa ampollas de agua marina procesada. Como ellos no venden libros ni dan charlas, dicen que el agua de mar es buena, pero solo si lleva su logotipo. Si no, es tóxica. Y el tercer “elemento” del debate es una afectada por la supuesta enfermedad “sensibilidad química múltiple”, padecimiento tan inexistente como la sensibilidad a las emisiones de los routers wifi, que afirma que se ha curado gracias al agua de mar.  Vergonzoso y surrealista.

(1/2) Beber agua de mar, debate en Espejo Público con Ángel Gracia y Laura Tauste entre otros

 

Disolución de agua de mar

En el reportaje se muestra cómo mezclan una parte de agua de mar con 3 partes de agua dulce. El agua de mar contiene unos 35 gr por litro de sal, mientras que nuestra sangre tiene aproximadamente 9. Mezclando agua con estos porcentajes da una salinidad de :

(35*1+0*3)/4=8,75 gr/l

Es decir, prácticamente una solución isotónica. Se puede beber tanto agua con esta salinidad como podamos aguantar antes de que se nos reviente el estómago o la vejiga. Mucho más que de agua dulce, que también es tóxica cuando se bebe en exceso. Que se lo digan a esta mujer, que murió tras beber de una tacada 7 litros y medio de agua en un concurso para ganar una consola wii. :facepalm:

 

Hiponatremia e hipernatremia

Ambas son trastornos en el equilibrio de sodio en la sangre. La hiponatremia, ocurre cuando la concentración salina en la sangre es muy baja, provocando que por ósmosis el agua de la sangre pase al interior de las células, hinchándolas y potencialmente reventándolas. El cerebro es el fusible que primero salta cuando la hiponatremia es severa, muriendo el paciente por edema de las células cerebrales. Cuando la concentración de sal en la sangre es muy alta, el mismo proceso de ósmosis produce que el agua del interior celular pase a la sangre. Esto interfiere en la conducción nerviosa, produciendo alucinaciones, espasmos y por último, paro cardiaco.

 

¿Qué es la ósmosis?

Cuando ponemos soluciones con distinta concentración a ambos lados de una membrana semipermeable (cuyos poros son suficientemente grandes para dejar pasar las moléculas de agua, pero no tanto como para dejar pasar las de una sustancia diluida en ella), el agua pasará de un lado al otro de la membrana para intentar equiparar  la concentración a ambos lados de la misma. En este video podemos comprender de una manera muy gráfica en que consiste este fenómeno.

Ósmosis

 

Mito: ¿qué beben los mamíferos marinos?

La principal fuente de agua de los mamíferos marinos es los líquidos de los peces de los que se alimenta. Unos riñones y un hígado especialmente eficiente procesan el agua marina que pasa a su sistema digestivo. La concentración de sal en su orina es muy alta. Como estos mamíferos no traspiran, las pérdidas de líquidos son limitadas. Fuente.

 

Mito. Al sumergirse en agua de mar se está transfiriendo agua salada a nuestro organismo

La piel humana no es permeable, y por lo tanto no se transfiere agua ni del mar al cuerpo ni del cuerpo al mar. Bueno, esto último todos sabemos que no ocurre en todas las personas. Pero no por la piel. Fuente.

 

Mito. Todas las bacterias terrestres mueren al entrar en contacto con el medio marino

El mar tiene, en efecto, mecanismos para procesar los residuos fecales y las bacterias que llegan a él desde la superficie terrestre. Uno de esos factores es la salinidad. Pero la concentración de sal no es igual en alta mar que en algunas zonas costeras, que reciben mayor aporte de agua de interior, o que se renuevan con más lentitud. Además algunas bacterias procedentes de los vertidos de aguas fecales son más resistentes a la salinidad y en ocasiones aparecen en las costas, como las enterobacterias klebsiella y pseudomonas aeruginosa. Fuente. Fuente.



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